Desde que comenzó el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO) el 20 de marzo, tanto el Gobierno Nacional como el Gobierno de Formosa anunciaron una serie de medidas para enfrentar la pandemia por el coronavirus. Los programas de asistencia fueron reforzados, se otorgaron créditos a tasas subsidiadas, la distribución alimentaria se multiplicó y las transferencias a distintos organismos se incrementaron para cubrir primordialmente las áreas de salud y seguridad social.
La decisión del Gobierno Provincial fue disponer una inversión total de $2.286.386.705 para la atención en Formosa. Los datos fueron proporcionados por el Ministro de Economía de la provincia, Jorge Ibañez, durante una conferencia del Consejo de Atención Integral de la Emergencia COVID-19. Según puntualizó el funcionario fueron las instrucciones del primer mandatario provincial implementar políticas concretas para enfrentar la contingencia.
El positivo nivel alcanzado en el estatus sanitario de Formosa y el proceso de mayor flexibilización, permite tener habilitados el comercio, peluquerías, la actividad industrial, restaurantes y bares, caminatas al aire libre los fines de semana y feriados, reuniones familiares, entre otras actividades.
Sin embargo, la decisión del Gobierno de la Provincia fue desde el inicio del ASPO sostener e incrementar las partidas al Programa Alimentario Nutrir, garantizar la compra de insumos y medicamentos, prever centros de alojamiento preventivos con infraestructura para que las personas que deban cumplir con la cuarentena obligatoria reciban toda la atención necesaria. Se debe destacar que el Gobernador norteño, decidió habilitar el Hospital Interdistrital Evita, único en la Argentina, para la atención monovalente para diagnosticados con COVID-19.
El Ministro de la Comunidad, Aníbal Gómez, aseguró que “todos los costos que requiere asumir esta pandemia y obtener estos resultados están a cargo del Estado provincial”.
Además, desde el punto de vista sanitario, el integrante de la mesa del Consejo de Atención Integral de la Emergencia indicó que los pacientes con COVID-19 que permanecen internados en el hospital son atendidos con la máxima tecnología.
Con 200 casos y un solo fallecido por coronavirus, la Provincia de Formosa sigue resguardando el estatus sanitario que logró hasta el momento, en un contexto desfavorable para la región con picos de contagios.
El sistema de salud cuenta con la infraestructura y los profesionales preparados para enfrentar la pandemia en Formosa, desde el equipamiento de bioseguridad para el personal de salud, confeccionados en el Programa de Desarrollo Productivo Industrial del Sector Textil de Formosa (FONTEX).
Además desde fábricas locales, carpinterías e integrantes de cooperativas son los encargados de confeccionar los elementos necesarios para los Centros de Alojamiento, donde realizan la cuarentena cientos de personas, en el marco del Programa de Ingreso Ordenado y Administrado dispuesto para las personas que se encontraban fuera de la provincia al momento de la disposición del ASPO.
De esta forma, el sector textil también colabora con otros sectores de la provincia, en la preparación ante la pandemia del coronavirus.
La inversión del Gobierno de Formosa para la atención de la emergencia por el COVID-19, y los fondos que recibe la Provincia desde el Poder Ejecutivo Nacional, no alcanzan para hacer frente a los costos de la pandemia señalaron.
La administración de Gildo Insfrán desde hace más de 10 años cuenta con superávit fiscal. Si bien la recaudación tributaria bajó en este contexto por la pandemia del coronavirus, el Estado provincial aseguró el ingreso y los estudios de PCR que en otras provincias se cobran para ingresar.
Una persona alojada en los centros de aislamiento que ingresa por el programa de ingreso ordenado y administrado debe realizarse los hisopados al ingresar y dos antes de retirarse de los centros de aislamiento. Sumado a ello, la alimentación es otorgada por el sistema público de Formosa.
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