Hace más de 6 años el rapero catalán Pablo Hasél, fue juzgado y encontrado culpable de “enaltecimiento del terrorismo e injurias a la corona”, delito por el cual fue sentenciado a 2 años de prisión y una multa de 30.000 euros. La historia sigue actualmente con las calles del país sacudidas por protestas.
La situación en aquel momento fue tensa pero ya que Hasél tenía un expediente penal impoluto, la pena, que no superaba los dos años, fue suspendida.
Pasados los años, en 2018, fue juzgado nuevamente por las letras de sus canciones y en esta oportunidad, los jueces catalanes lo encontraron culpable y anexaron este caso más reciente, a los dos años que tenía pendiente, y dictaron su prisión por 9 meses.
Esta situación fue un detonante clave para que en España vuelva la discusión sobre la libertad de expresión, derecho que fue violentado categóricamente durante varias décadas en la dictadura franquista.
En la actualidad, los jóvenes no soportaron ni tuvieron paciencia con la Justicia catalana. A más de dos años después de que lo encontraran culpable, por segunda vez Pablo Hasél tuiteó en su cuenta oficial que pronto lo encarcelarían y que no permitan que callen bocas con miedo.
Esta fue la mecha que encendió una bronca que fue incontrolable por varias noches, en las dos ciudades más importantes de España: Madrid, su capital, y Barcelona, el epicentro de las protestas.
Pero ¿quién es Pablo Hasél?
Pablo Rivadulla Duró tiene 32 años y está preso por cantar y tuitear contra la corona española.
Este rapero fue acusado, entre otras cuestiones, de fomentar el “odio” contra el partido gobernante, el PSOE (Partido Socialista Español) y por publicar un videoclip en Youtube, titulado Juan Carlos el Bobón, realizando una broma sobre el origen de la familia real española, del linaje Borbón.
Intrépido, verborrágico, maestro de la repentización e inspirador para muchos, el auto apodado Pablo Hasél, gritó antes de ser aprendido en un patrullero de los Mossos catalanes -la fuerza pública más dura de la Comunidad Autónoma- “muerte al Estado Facista”.
Noches de furia: detenidos y heridos
Varias ciudades de la comunidad catalana como Girona, Barcelona o Sabadell, fueron los principales centros del disturbio ocurrido entre jóvenes y la policía.
Centenares de personas fueron detenidas por daño público y resistencia a la autoridad, dejando miles de euros en pérdidas en comisarías locales, y decenas de policías heridos en los enfrentamientos.
“La violencia pasó un límite inesperado, inaceptable” declaró la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, tras una semana de destrozos en la vía pública y una violencia pocas veces vista.
Uno podría pensar que Hasél sólo despertaría empatía en sus pares catalanes, pero la capital del país, Madrid, también se sumó a la lista de ciudades que hicieron frente a las autoridades en reclamo por el encarcelamiento del rapero.
Por su parte, varias organizaciones de renombre como Amnistía Internacional y más de 200 artistas entre los cuales se destacan Joaquín Sabina, Pedro Almodovar, Joan Manuel Serrat y el mismo Vicepresidente español, Pablo Iglesias, han comunicado su repudio total por el acto, que muchos consideran como una violación a los principales derechos humanos,
Por lo pronto, Pablo Hasél está cumpliendo su condena por 9 meses de prisión en una correccional catalana. Mientras, del lado de afuera de los muros, las calles en España siguen caldeadas aunque con menos violencia que hace algunas jornadas.
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