El jueves al mediodía el Consejo de Atención Integral de la Emergencia COVID-19 debió definir que Formosa Capital vuelva a la Fase 1 del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO) ante el crecimiento de la curva de contagios.
El ASPO es la única única alternativa para aplanar la curva y evitar más contagios, explicó el Ministro de Desarrollo Humano Anibal Gómez. Asimismo, el Consejo de Atención Integral a la Emergencia COVID-19 realizó varias reuniones e instancias de diálogo con los gastronómicos y comerciantes.
El viernes al mediodía varios sectores se convocaron frente a Casa de Gobierno para protestar contra la decisión del Gobierno de Formosa. La manifestación masiva terminó con incidentes. Hubo heridos, entre manifestantes y policías, y más de 90 detenidos. Un miembro de la fuerza policial se encuentra en estado de gravedad.
En respuesta a la vuelta a la Fase 1 del aislamiento, autoconvocados, sectores políticos de la oposición al Gobierno de Formosa, y comerciantes que no quieren cerrar nuevamente sus locales ante las consecuencias económicas, decidieron marchar hacia la Casa de Gobierno para protestar por la medida. La Policía armó dos vallados para evitar que los grupos se acercaran a la sede del Ejecutivo Provincial. Ante esto, los enfrentamientos entre manifestantes que intentaron pasar las vallas e ingresar al edificio terminaron en descontrol social.
En medio del enfrentamiento que comenzó el viernes cuando un grupo de manifestantes autodenominados “libertarios” pretendía ingresar a la Casa de Gobierno de Formosa y pasar las vallas que contenía la policía.
“Un grupo de personas de la ciudad de Formosa, disconformes con las decisiones sanitarias, recurrió a la violencia extrema para realizar sus reclamos. Nada justifica este tipo de acciones violentas. Llamamos a la reflexión e invitamos a que todos sus reclamos los realicen de manera pacífica”, planteó Jorge González, uno de los voceros de la mesa del Consejo.
El intento de la Policía de Formosa para disuadir la manifestación y evitar el despliegue de la protesta, endureció el enfrentamiento entre la fuerza y cientos de manifestantes, algunos de los cuales arremetió contra el cerco policial que se formó luego de que tiraran las vallas.
La Policía lanzó a manifestantes balas de goma y chorros agua en medio de la humareda generada por los gases lacrimógenos. Los manifestantes contra las medidas sanitarias respondieron con escombros, piedras, golpes y corridas hacia la Legislatura Provincial de Formosa y principal avenida de la ciudad.
Las imágenes de manifestantes heridos de balas de goma y policías ensangrentados se multiplicaron por las redes sociales y los medios locales. Con el correr de las horas el nivel de violencia creció y derivó en detenciones.
Los manifestantes, sobre todo comerciantes, reclamaron libertad para trabajar. Los sectores políticos acompañaron la marcha convocada y aprovecharon para manifestar sus consignas políticas contra el Gobernador de Formosa.
El Ministro de Gobierno, Seguridad y Justicia, Jorge Abel González, explicó el procedimiento llevado a cabo durante la manifestación y dijo que un grupo de personas provocaron disturbios, destrucción de la propiedad pública y violencia hacia las fuerzas de seguridad. Asimismo, cargó la responsabilidad del hecho a los sectores políticos que intentan sacar rédito sobre la situación. La situación comenzó a tensarse desde el día anterior, cuando un grupo reducido de personas tiró huevos a Casa de Gobierno, lo que despertó el alerta y motivó al vallado sobre Belgrano y 25 de mayo.
El Ministro expresó que “no hay una actitud de salir a reprimir”, sino que se trata de un proceso que “está debidamente documentado porque está dentro de un marco judicial”.
También, González argumentó que dichas situaciones de violencia se dieron en distintos lugares de la zona cercana a Casa de Gobierno y que además, fue atacada la Legislatura Provincial provocando daños de distintas consideraciones al edificio; “una situación de violencia a la cual no estamos acostumbrados los formoseños”.
El clima de tensión y enfrentamientos en la calurosa siesta de Formosa duró por varias horas. Durante la noche, pese a las restricciones de distanciamiento social, muchas personas se autoconvocaron en el microcentro de la ciudad para realizar un bocinazo, mantener los negocios abiertos, acompañar al sector gastronómico que decidió mantener las puertas de sus locales abiertas en señal de protesta y resistir a la vuelta a Fase 1 decretada como medida sanitaria por el Gobierno de Formosa.
La situación se desmadró por la noche, cuando cientos de jóvenes cortaron la principal avenida de la ciudad de Formosa, llevaron conservadoras con bebidas alcohólicas, sin barbijo y distanciamiento social reclamaban por la “libertad”. Muchos de ellos, eran menores, también hubo incidentes entre grupos. El peligro sanitario que significó esa aglomeración innecesaria, fue criticada en redes sociales al entender que el festejo solo banalizaba el reclamo y perjudicaba a los comerciantes.
Este sábado a las 11:30 h varios grupos de personas, entre ellas el sector gastronómico y comercial, sectores culturales, y otros afectados por la pandemia se concentraron frente a la Casa de Gobierno para reclamar el levantamiento de la Fase 1 y reactivar las actividades comerciales. Fue el tercer día de protestas.
En respuesta, el Consejo de Atención Integral a la Emergencia COVID-19, expresó que se realizaron varias reuniones e instancias de diálogo con estos sectores. Los comerciantes y gastronómicos pidieron que los grupos que incitaban a la violencia se retiren de la marcha y cuestionaron el aprovechamiento político de la oposición.
El organismo aclaró que se encuentran exceptuadas del aislamiento las actividades y servicios declarados como esenciales, entre ellos, personal de salud, personal docente, fuerzas de seguridad, autoridades superiores de los gobiernos nacional, provincial y municipal.
Por parte del Gobierno de Formosa, aseguran que el objetivo de la medida de aislamiento y Fase 1 obedece únicamente a una estrategia sanitaria para descender la curva de contagios. Hasta el momento, Formosa es la única provincia que tiene menos casos y muertes por coronavirus en el país.
Según explicó por el aumento de los casos y la movilidad de personas Formosa volvió a Fase 1 como anteriormente había ocurrido en enero después del pico por las reuniones sociales y familiares en las fiestas de fin de año. La medida sanitaria dispuesta es para evitar la circulación de personas y demoler la curva de contagios en Formosa y evitar las muertes que se generaron en otras provincias, tras las aperturas sin retrocesos marcados en sus fases sanitarias.
El ministro de la cartera de salud, dijo que la oposición política de Formosa, “respondió políticamente frente a una medida sanitaria que ha tomado el Gobierno”.
Luego del viernes las protestas se desarrollaron sin enfrentamientos. Por otro lado, desde Buenos Aires, figuras nacionales de la oposición nuevamente vienen a la provincia, con la finalidad de desacreditar los resultados sanitarios y la baja mortandad en la provincia por COVID-19. Esta vez los opositores manifestaron apoyo político a las manifestaciones con la intención de sumar rédito a cambio.
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