Espacio Reciclado es un galpón donde funcionaba una fábrica de harina y luego un taller mecánico. Una iniciativa de un grupo de personas logró transformarlo en una sala de ensayo, arte y teatro.
El lugar está ubicado en Pasaje Misiones casi esquina Trincheras de San José y López Torres, a pocas cuadras del microcentro de la ciudad de Posadas.
Funciona como lugar de arte, o bien, un centro cultural. Allí se realizan desde obras de teatro hasta talleres de música, plástica y literatura.
Sobre su creación, Karin Scholler, integrante del equipo de gestión explicó a NEAHOY: “Somos una iniciativa que nace de la necesidad de tener un espacio para producir arte y que se viene sosteniendo hace 15 años”.
El Espacio Reciclado trabaja con un público joven o adulto; hoy por hoy existen funciones destinadas a todas las edades. En otras épocas habían talleres que eran tomados por niños y niñas pero en este momento no están funcionando.
El arte y la pandemia
Como a la gran mayoría de los artistas y salas de teatro, Espacio Reciclado sufrió la imposibilidad de realizar su trabajo debido a la pandemia ocasionada por el virus COVID-19.
En el primer periodo de aislamiento el teatro estuvo cerrado completamente, mientras que desde octubre se habilitaron los talleres con todos los protocolos. Asimismo, en enero comenzaron las funciones para público reducido, que actualmente lo siguen implementado.
Sholler expresó que fue muy difícil sostenerse en pandemia aunque “nos vino muy bien el subsidio a nivel nacional Podestá que se entregó a todas las salas de teatro”, cerró.
El lugar
El edificio es propiedad familiar de uno de los integrantes del equipo de gestión, que está al frente de Cachu Orellano y Carolina Gularte.
El nombre Espacio Reciclado surgió porque gran parte de los objetos que hay allí adentro son de material reciclado. Los fundadores hicieron una recolección de objetos para una posterior transformación.
La joven que integra el galpón de arte destacó: “El mismo edificio es reciclado ya que anteriormente era un depósito de harina, un taller mecánico y ahora un espacio cultural donde también consideramos que reciclamos nuestras propias experiencias y emociones”.
Objetivos concretos
Los protagonistas invirtieron mucho tiempo y recursos en cumplir los requisitos para contar con la habilitación municipal: obtenerla será el próximo objetivo, ya que posibilitará contar con más apoyo y subsidios.
Scholler indicó que sueña con “producir obras de teatro y potenciar los talleres del espacio”: “¿Por qué no generar una retribución para las personas que trabajamos en el lugar?”, se preguntó.
Cabe destacar que el crecimiento paulatino posibilitará generar un equipo de trabajo para sostener la sala con el menor esfuerzo económico posible de las personas implicadas. De esta manera, Posadas se asegurará que el galpón del arte continúe reciclando emociones.
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