Recientemente, en algunos medios nacionales se replicó la noticia de que en Buenos Aires, a pesar de la reapertura de actividades y reactivación económica, varios restaurantes permanecen cerrados por falta de personal.
La noticia despertó polémicas en cada medio y red social donde se publicó. Algunos comentarios se apuraron en culpar a los planes sociales y la falta de cultura del trabajo, pero inmediatamente aparecieron comentarios de personas que trabajaron en el sector advirtiendo que la falta de personal se debía a que los sueldos no justifican las largas y exigentes jornadas laborales.
La reapertura
Por su naturaleza, el sector gastronómico fue uno de los más golpeados por la pandemia. Algunos restoranes debieron permanecer cerrados durante más de un año por la pandemia, o abrir con restricciones de mesas o limitar la producción de shows y eventos que pudiera atraer público.
Pero a pesar de que las restricciones vienen flexibilizándose cada vez más y que los índices demuestran una importante recuperación económica, algunos restoranes de las capitales se encontraron con una nueva dificultad: la falta de personal para cubrir los puestos que quedaron vacantes durante la pandemia.
Un dato relevante es el que aportó a Infobae la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos (Uthgra), afirmando que el promedio de edad de los trabajadores del sector viene bajando desde hace tiempo, encontrándose hoy en los 25 años.
Esto pasa porque, cuando un trabajador va creciendo en edad, va adquiriendo más necesidades que cuando era joven, cómo mantener a una familia o cuidar a sus padres. Si el sector no le ofrece carrera, capacitaciones y crecimiento en el rubro con un sueldo que lo acompañe, se ve forzado a migrar a otro sector.
En este contexto, se especula que los trabajadores que quedaron cesantes durante la pandemia encontraron trabajo en otros lugares, como las aplicaciones de delivery.
De salarios y de responsabilidades
En respuesta a las lecturas de los empresarios del sector, los comentarios de personas que trabajan o trabajaron en el sector explican la “falta de personal” con la falta de salarios acordes al puesto.
“Falta de personal” y”Salarios desactualizados” la causa de Clarín del problema gastronomico.
Por favor! Prueben con registrar a laburantes y cumplir con salario de convenio colectivo. https://t.co/n3ugFysWaB
— Damián Ledesma (@damian_ledesma) October 11, 2021
Una joven denunció en un tuit que se hizo viral que un restorán le ofrecían $20.000 mensuales por ocho horas diarias y un solo franco. Otro empleado publicó que había renunciado a su trabajo en una parrilla de Palermo porque cobraba menos de 25 mil pesos por mes por 12 horas diarias.
Al analizar la problemática, la youtuber Bel Bozzolo, que trabajó 11 años en el sector gastronómico, cuestionó a la UTGHRA por la falta de movilización para exigir el cumplimiento de los convenios. Además, agregó a la baja contraprestación la cantidad de estudiantes del interior del país que solían ocupar las vacantes y que, durante la pandemia, volvieron a sus lugares de origen para continuar sus estudios de forma remota.
A pesar de que los precios del menú fueron subiendo con la inflación, desde hace mucho que el salario de un mozo no cubre el alquiler de un departamento de dos ambientes. Esperando que con las propinas se cubra el costo de vida, los salarios que ofrecen los restoranes se encuentran desactualizados aún antes de la pandemia.
Desgaste físico y sobreexigencias
Hay que tomar en cuenta que los puestos requieren de una atención constante en momentos de tensión y desgaste físico, y los trabajadores difícilmente puedan generar otro tipo de emprendimiento mientras se desarrollan en el sector.
A esto se le suma lo que en los comentarios se describe como “explotación”. Aunque las convocatorias digan “mozo” o “bachero”, es común que una vez en el trabajo los empleados exijan otras actividades ajenas al puesto. Además, aunque se les pague por ocho horas, se suele exigir a los trabajadores quedarse hasta el “horario de cierre” y muchas veces se supera este límite de horas.
Con todo esto, las poblaciones que comúnmente tenían la necesidad de trabajar en el sector a pesar de los bajos sueldos y largas horas, hoy elijan otras opciones que les brinde contraprestaciones un poco mejores.
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