La Legislatura correntina sancionó la ley que declara Monumento Natural al mono Carayá. El proyecto fue presentado por medio de una iniciativa de sectores sociales que se dedican al activismo ambiental y la conservación de los animales en Estaciones Biológicas como la del Parque Provincial San Cayetano.
Por medio de la norma, se incrementará la protección legal del animal que se encuentra en una situación de vulnerabilidad, debido a la progresiva pérdida de espacio en su hábitat natural.
Cabe recordar que la media sanción la obtuvo en la Cámara de Diputados a fines de septiembre con unanimidad por parte de los legisladores. En este caso sucedió de forma similar, ya que recibió el apoyo de los distintos bloques parlamentarios.
En diálogo con NEA HOY, el investigador del CONICET y Director de la Estación Biológica de Corrientes, Martín Kowalewski, señaló que la especie se encuentra actualmente en la categoría de peligro, es decir que inició su proceso de extinción. Esta información fue publicada por la Unión Internacional de la Conservación de la Naturaleza UICN, quien además indicó que la situación de otras cinco especies de monos en Argentina es de vulnerabilidad.
“El Carayá tiene una categoría peor que no es vulnerable si no que está en peligro. Por ello, toda esta situación que no es una situación específica de Argentina sino que es regional y planetaria, nos llevó a pensar que habría que generar estrategias para proteger a estos animales antes de que se extingan, porque todos los modelos que tenemos apuntaban a que en una cantidad de años las poblaciones de monos se iban a reducir muchísimo hasta el punto de no poder sostenerse en el tiempo”, dijo Kowaleski.
Y señaló que, junto a los grupos ambientalistas, decidieron actuar antes de esperar a que se produjera la extinción de los monos. Es así que comenzaron a trabajar con escuelas secundarias de la capital, de Riachuelo y San Cayetano.
A su vez, realizaron una campaña de recolección de firmas para dar mayor impulso al tema. En medio de la pandemia, el incendio que se produjo en la Estación Biológica provincial generó un incremento de las firmas, que llegó a alrededor de 27.000 y logró visibilizar mucho más esta situación.
A partir de esta situación crítica, contó el Director de la Estación, recibieron el apoyo del Presidente de la Cámara de Diputados, Pedro Cassani, quien se contactó con los conservadores de especies y trabajaron en la redacción del proyecto de ley.
Aplicación de la ley
Sobre cómo contribuirá la ley a conservar la especie de los monos carayá, Kowaleski aseguró que el órgano de aplicación provincial es la Dirección de Parques y Reservas. El organismo, una vez que esté promulgada la norma, tendrá que reglamentarla para que se conozca como va a funcionar.
En esta reglamentación deberá aclarar si la provincia tendrá que invertir fondos o no, y de qué forma, cuáles van a ser los efectos punitivos sobre aquella persona que decida hacer daño a estos animales o los hábitats donde vive.
Asimismo, si se apuntará a incentivar procesos de concientización y educación amparados por la ley de educación ambiental.
“Claramente una ley no va a ayudar de repente a parar la extinción de estos animales; sería iluso pensar eso, pero creo que estas leyes les dan a los ciudadanos herramientas para proteger la biodiversidad. Entonces si alguien ve que viene una corporación empresarial a talar un bosque para algún emprendimiento inmobiliario, podría evitar que pase o generar que estos responsables cumplan con multas, con mitigaciones ambientales de modo que no tengan ganas de hacerlo más”, finalizó el investigador del CONICET.
Opinión de los ambientalistas
Diversos ambientalistas se pronunciaron sobre la sanción de la ley que declara al Mono Carayá como Monumento Natural de Corrientes. Entre ellos, Luis Martínez conversó con NEA HOY y señaló que su conservación es muy importante ya que es una especie que se encuentra en la lista de especies vulnerables.
El especialista dijo que “la destrucción de sus montes es para dar lugar a la producción maderera, agropecuaria o la urbanización, que lo ha dejado sin hábitat, y la estupidez criminal del mascotismo hizo y sigue perjudicando a esta especie”.
Por otra parte, añadió que conservar no significa abandonar, sino ejecutar acciones basadas en buenas prácticas que permitan mantener y sostener la vitalidad de los ecosistemas autóctonos, donde vive el Carayá.
En esa línea, consideró que es fundamental cuidar de las especies para que no se lleguen a estás instancias ya que no se puede declarar monumento natural a todos los animales. Para ello, indicó, es fundamental la educación ambiental.
ADEMÁS EN NEA HOY:
