La violencia, el acoso y las amenazas en redes sociales existen desde hace mucho tiempo pero pocas personas se animan a denunciar. El problema es, cuando esa violencia afecta nuestra salud mental y vida diaria. En este caso, una joven chaqueña victima de abuso sexual, denunció a la familia del abusador, por hostigamiento en redes sociales.
En esa línea, la Jueza de Faltas de Barranqueras, Sandra Saidman hizo lugar a una medida cautelar para que la joven sea protegida con apoyo de las fuerzas de seguridad de la provincia. También ordenó una serie de medidas que los agresores deben cumplir para evitar otras sanciones.
El fallo significa mucho para la víctima del acoso pero también marca un antecedente para otros casos de este tipo. En diálogo con NEA HOY, Sandra Saidman contó por qué decidió tomar esta medida y resaltó la importancia de que la Justicia -de cualquier fuero- posea una perspectiva de derechos para actuar.
Denuncias y sentencias por ciberacoso en redes sociales
La causa inició con la presentación de la joven ante el juzgado de Barranqueras, donde relató que en abril del 2020 denunció a un sujeto por abuso sexual, y desde ese momento su vida se convirtió “en un infierno” debido a que los padres de su abusador iniciaron una feroz campaña de ciberacoso en su contra.
Según su relato, llamaron a su mamá para hablar mal de ella y hasta se hicieron pasar por funcionarios de una fiscalía para recabar datos personales respecto de su domicilio. La madre del abusador le envió amenazas a través de WhatsApp y la “escrachó” en redes sociales publicando fotos de ella donde la acusó de haber realizado una falsa denuncia contra su hijo.
También realizaron marchas para apoyar al abusador y pasaron por enfrente a su casa para escracharla por “promover una denuncia por resentimiento”. La joven debió cambiar de domicilio y, luego, mudarse a otra provincia debido a la situación de violencia que vivía. También vio afectada su salud mental y física, debió acudir a profesionales para poder seguir con su vida; todavía teme cruzarse con las personas que la violentaron.
La Jueza Sandra Saidman dispuso una serie de medidas para proteger la integridad psicofísica de la víctima: ordenó a los denunciados que cesen en forma inmediata los actos de perturbación o intimidación que directa o indirectamente, mediante la utilización de redes sociales y/o cualquier otro medio informático bajo apercibimiento de incurrir en el delito de desobediencia de una orden judicial.
“La idea de este tipo de medidas es dar confianza en la Justicia y otorgar protección a una persona que se siente violentada y ve afectada su salud mental e integridad física. Si no se cumple, es desobediencia judicial, debe actuar el Ministerio Público Fiscal tomando otras medidas”, explicó Sandra Saidman a NEA HOY.
También se ordenó a la comisaría de la jurisdicción, se dispongan las medidas de seguridad necesarias para garantizar la seguridad de la joven estableciéndose toda otra medida acorde, a efectos de evitar la repetición de todo acto de perturbación o intimidación, agresión y maltrato de los agresores hacia la víctima. La autoridad policial deberá acudir en forma inmediata a su auxilio, cuando la misma lo requiera.
Finalmente, se requirió al Equipo Interdisciplinario de Asistencia a las Víctimas de la Violencia Familiar de la Provincia que, en forma urgente y sostenida, brinden asistencia psicoterapéutica a la joven.
Entre los fundamentos, Sandra Saidman advierte que “las mujeres jóvenes son más vulnerables al daño del ciberacoso por la desigualdad en la consideración y valoración social a la que se someten los comportamientos y las imágenes de las mujeres en la relación de pareja, por lo que su vivencia es muy traumática”.
También aseguró que resulta necesario e importante entender la facilidad con la que en internet se puede ejercer violencia contra una mujer sin necesidad de tener contacto con ella.
Un tipo de violencia hacia las mujeres
Vale recordar que el hostigamiento es un delito que se encuadra en las disposiciones del Art. 139 ter Código de Faltas (Hostigamiento digital), definido como una acción realizada mediante medios digitales (TIC´s) de manera sistemática y sostenida con la intención de perturbar, injuriar, dañar, molestar, desprestigiar o ridiculizar a otra persona y que perdura en el tiempo y que afectan al desarrollo de una persona.
“El ciberacoso está regulado en nuestro Código de Faltas, siempre se toman estas medidas proteccionales y cautelares para acercar la Justicia a las personas que van al juzgado. El acoso hace muy mal, lastima y, en este caso, daña la salud mental de forma permanente. Esta medida es para cumplirse y proteger a la víctima”, afirmó la Jueza.
La Banca de la Mujer de la Nación está a punto de incorporar al ciberacoso como otro tipo de violencia de género a la Ley Nacional de Protección Integral de las Mujeres. En ese sentido, Sandra Saidman destaca lo importante que es que la Justicia incorpore estos cambios. “Una vez que se incorpore eso a la Ley pasará a ser un delito denunciable en el fuero Penal, y ya no en el fuero de Faltas”, detalló.
Por último, Sandra Saidman advierte, entre los fundamentos del fallo, que no escapa al análisis de este caso el derecho constitucional a la libre expresión, sin embargo ese derecho no puede ir en detrimento de la dignidad de las personas. “La libertad de expresión es un valor de incalculable importancia en toda la sociedad democrática, pero su ejercicio no merece protección cuando se lesionan a otros derechos”, afirmó la Jueza.
ADEMÁS EN NEA HOY:
Perseguidos por garantizar el derecho al aborto legal. El caso de la Dra. Cecilia Ousset
Verano 2022: todo lo que necesitás saber para ingresar a Brasil desde Misiones
Formosa comenzará a exigir el pase sanitario para ingresar a eventos masivos y comercios
