El Gobernador correntino, Gustavo Valdés volvió a llamar la atención de los medios nacionales recientemente al afirmar que los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Censo (INDEC) eran “erróneos” respecto a la pobreza en Corrientes. El mandatario aseguró “no poder creer” que dicho índice ha bajado alrededor del 15% en su provincia y deja entrever que hubo una manipulación de datos; una constante de la oposición que pretende ficcionalizar los datos oficiales.
La acción del Gobernador de cuestionar números que favorecen tanto a su gestión podría llamar la atención, aunque no tanto si se tiene en cuenta la historia reciente, y que el año que viene hay una campaña presidencial de la cual, el radicalismo, quiere ser protagonista.
Vale recordar que Valdés lleva más de una ocasión en utilizar algunas cuestiones puntuales que involucran a la gestión de Alberto Fernández para sentar postura y mostrar un distanciamiento entre ambos signos políticos.
Mientras, Juntos por el Cambio se debate entre halcones y palomas para discutir qué papel tiene que tener la oposición: si negarse a todo o apoyar algunos aspectos de la gestión de Fernández.
Los dichos de Valdés, sin dudas, se enmarcan en el lanzamiento y, si se quiere, fortalecimiento de su campaña electoral, con miras al 2023, que emprendió hace varios meses de la mano del ala dura del radicalismo nacional.
Valdés entiende que es una de las principales imágenes opositoras del país, junto al Gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, y por ello prefiere disentir en mucho de los datos que elabora Nación; sus dichos no están muy lejos de los hechos por los principales referentes de Juntos por el Cambio al llegar al Gobierno.
En ese sentido, el radicalismo pareciera implementar una estrategia para cuestionar las cifras oficiales: luego de Valdés, el radical Rodolfo Suárez, Gobernador de Mendoza, también se ocupó de decir que eran números “raros” los brindados por el INDEC.
¿Buscar instalar un relato?
No es menor que fue una situación constante escuchar críticas contra el INDEC y la acusación puntual de que dicho organismo se mantuvo “paralizado” durante los últimos años del Gobierno de Cristina Kirchner y que las cifras no coincidían con la realidad.
Estos dichos actuales del Gobernador correntino buscarían trascender la mera discusión política entre ambos bandos, oficialismo y oposición, e impactar en la opinión pública con el fin de acusar de ficticios los datos publicados por el Gobierno Nacional, que si bien ha tenido una baja leve en cuanto a los números de la pobreza, no así en cuanto a las cifras de la producción, que el año pasado alcanzó muy buenos niveles.
No sería raro que se busque que la población desconfíe de todos los índices oficiales que se den a conocer en adelante y desestime los logros que la gestión de Fernández alcance diciembre del año próximo. Debe recordarse que, cuando gobernó Juntos por el Cambio, era común escuchar que la población vivió una ficción al tener cierto nivel de vida, lo que quedó inmortalizado en la frase del economista Rosendo Fraga: “Le hicieron creer a un empleado medio que podía comprarse celulares e irse al exterior”.
Duro opositor
Para ilustrar esta idea del rol “opositor duro” que parece haber asumido Valdés hace bastante tiempo, basta ver su posición durante los lamentables incendios que azotaron a la provincia durante el verano.
Si bien el Servicio Nacional del Manejo del Fuego indicaba los recursos puestos a disposición por el Gobierno Nacional, específicamente por el Ministerio de Ambiente, Valdés se negó a aceptar que se hubieran prestado dichas asistencias a la provincia.
A todo esto, no es menos cierto que los bomberos voluntarios correntinos carecen de recursos desde hace mucho tiempo, lo que queda en evidencia con la donación que hizo el influencer Santi Maratea para estos, en los que se entregaron elementos básicos para cualquier cuartel, lo que nunca motivó a un cuestionamiento a la gestión provincial, pese a que se encuentra en el poder desde hace décadas.
La situación llevó a que el Ministro de Ambiente deba dar declaraciones en la Cámara de Senadores y detallar el modo de actuar de su cartera desde los primeros días de enero.
Algo similar sucede ahora con la crítica del mandatario correntino a los datos publicados por el INDEC ya que generó que el organismo, dirigido por Marco Lavagna, emitiera un comunicado ratificando los índices que dieron a conocer la semana pasada.
“El equipo técnico de la Dirección de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) realizó un análisis sobre los resultados difundidos y determinó que el procesamiento, la aplicación de los ponderadores, la consistencia interna de las diferentes variables y la determinación de las tasas de cálculo son correctos”, señaló el comunicado.
De igual modo, el INDEC anticipó que llevará adelante una evaluación del proceso de recolección de datos muestrales ya que son las provincias las responsables de implementar dicha recolección, bajo normas técnicas y metodológicas establecidas y controladas por el Instituto nacional.
A los números nacionales, Valdés lo contrasta con sus cifras locales y habla de que en su provincia la pobreza supera el 40%.
Fuertes críticas, Alemania y el riesgo de ficcionalizar las estadísticas
Si por un lado el Gobernador correntino se mostró conciliador señalando que podrían haber errores en los datos que recolectó el INDEC, los cuales debe enviar la provincia, también lanzó una fuerte crítica al organismo aludiendo a una manipulación de las estadísticas.
“La estadística tiene que ser un norte para tomar decisiones, si nosotros creemos que estamos viviendo en Alemania, vamos a estar tomando el camino equivocado”, dijo el mandatario.
Cabe recordar que la alusión a Alemania fue realizada por los dichos del entonces Jefe de Gabinete de Cristina Kirchner, Aníbal Fernández, cuando señaló que la Argentina tenía menos pobres que el país europeo.
“La situación no está fácil, no puede ser que bajemos 15 puntos en este difícil contexto económico y de inflación”, dijo Valdés. Además, desmintió que los índices de desocupación sean los que publicó el Instituto, fundamentando en que se ve a mucha gente pidiendo trabajo en las calles.
Discusión por un punto de coparticipación
En las últimas horas, de la mano del Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, Gustavo Valdés despertó el reclamo a Nación por el punto de coparticipación que adeuda a Corrientes desde 1987.
El tema lo pone en sintonía con el Gobierno porteño, otro férreo opositor al Gobierno nacional, quien llevó la discusión a la Corte Suprema de Justicia.
“Hace 30 años estamos atentos a esta discusión. Lo más justo en esta deuda sería que nos devuelvan el punto de coparticipación que anda dando vueltas, porque en 1987 hubo tres jurisdicciones que retrocedieron respecto a las otras”, señaló Valdés a medios radiales.
Y explicó: “A Buenos Aires se le pagó y se le devuelve mediante el fondo de reparación histórica del Conurbano bonaerense, La Rioja la recuperó cuando Menem (por Carlos Saúl) fue Presidente (de Argentina) y se le puso un punto de coparticipación en el Presupuesto Nacional. Y Corrientes quedó exactamente como estaba antes”.
Si bien, se puede considerar correcto el reclamo de la provincia, es curioso que en plena disputa electoral Valdés despierte esta antigua discusión, sobre todo cuando al momento de discutir los subsidios por transporte que recibe CABA el radical se mantuvo distante, no así Gerardo Morales. La coparticipación, ¿podría ser otra causa que lo enfrente y distancie aún más del Gobierno Nacional? Habrá que ver si avanza por la misma vía que eligió el Gobierno porteño.
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