En la Provincia de Corrientes existe aún un gran número de personas que no tienen acceso al servicio de energía eléctrica por habitar en zonas muy alejadas de las grandes ciudades. Como respuesta a esta situación, en los últimos años, se desarrollaron estudios que demuestran la factibilidad de proveer este servicio a través de sistemas de microrredes híbridas; algo que, en poco tiempo, podría mejorar la calidad de vida de miles de correntinos.
Según señala un artículo de la multinacional Finning, estos sistemas llevan más de 10 años fabricándose e instalándose en todo el mundo y su eficacia se ha demostrado en múltiples aplicaciones, asegurando un mejor rendimiento y una producción de energía más confiable, a través de una instalación rápida y sencilla.
Muchos países del mundo invierten en esta tecnología por la creciente necesidad de acercar los puntos de generación de energía a los pequeños centros de cargas, atendiendo la preocupación por el cambio climático que demanda, cada vez más, el uso de energías renovables.
¿Qué son las microrredes híbridas?
Una microrred híbrida es una solución que permite la integración de fuentes de energía renovables con sistemas de almacenamiento de energía y sistemas de generación convencionales con el objetivo de garantizar la continuidad de la producción de las industrias y el desarrollo de las comunidades, explica Juan Pablo Amar, Vicepresidente de Operaciones de Finning en Chile y Bolivia.
Su campo de aplicación es muy amplio, pudiendo disponer de una red eléctrica confiable y amigable con el medio ambiente, para pequeñas comunidades y clientes con cargas industriales distribuidas, así como un suministro eléctrico confiable a emplazamientos mineros y desde pequeñas torres a grandes centrales de telecomunicaciones.
Su principal objetivo es garantizar una fuente de energía local, económica y fiable para las comunidades, islas, empresas y puntos aislados con acceso limitado o nulo a la red eléctrica principal.
La eficiencia de la microrred híbrida se logra a través del eficiente suministro de energía eléctrica proporcionado, el que está formado por una componente renovable y otra tradicional (Combustibles Fósiles), donde su sistema de control determina la cantidad de energía disponible desde fuentes renovables y la componente de energía tradicional necesaria para abastecer los requerimientos de las cargas, logrando suministrar una energía con menor uso de combustibles fósiles, contribuyendo a la reducción de la huella de carbono y economía en el uso de combustibles tradicionales.
El caso correntino
Un novedoso estudio realizado por el ingeniero Alexis Raúl González Mayans, investigador del Grupo en Energías Renovables de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura, fue presentado y expuesto recientemente en la Reunión de Comunicaciones Científicas y Tecnológicas de la UNNE.
El mismo señala que alrededor del 50% de la población sin acceso a la electricidad vive en zonas rurales remotas donde su difícil acceso, gran distancia y alto coste de conexión a las redes de transporte instaladas hacen que la única solución para alimentar energéticamente a estas poblaciones sean las microrredes aisladas alimentadas por sistemas híbridos renovables.
González Mayans analizó durante tres años el funcionamiento de una microrred configurada mediante un sistema híbrido solar/batería/diésel.
La misma se proyectó e instaló en 2019 para proporcionar acceso energético a los habitantes del paraje Malvinas, localizado al sureste de la provincia de Corrientes. De la operación y el mantenimiento se hizo cargo la empresa provincial Energía Correntina Sociedad Anónima (Encor SA), en colaboración con el GER UNNE.
Según indicó el ingeniero, se estima que la zona es habitada por 2.000 personas y no está conectada al servicio de energía. Sin embargo, el estudio se realizó en un sitio en que son beneficiadas cerca de 350 personas y otras instituciones comunitarias; cinco escuelas, una comisaría y un centro asistencial.
Características de la microrred Malvinas-Corrientes
Esta central híbrida, solar, fotovoltaica con baterías y grupo diésel de apoyo, posee una potencia solar instalada de 366 kWp. Su sistema de baterías tiene una capacidad de 730 kWh y el generador diésel es de 160 kVA.
El valor de demanda energética estimado inicialmente se incrementó en un 20% considerando la instalación de nuevos equipos de consumo en los domicilios (en el año cero) y alcanza, actualmente, una potencia máxima demandada de 54 kW y una proyección de aumento de la demanda del 2% anual durante 10 años, resultando en una potencia máxima de diseño de 66 kW.
En base a estos datos monitoreados de 2019 a 2021, se realizó un análisis con valores obtenidos por una simulación, más valores medidos utilizando la configuración existente de microrred y considerando además el consumo energético aportado por la Secretaría de Energía.
Aprobado para su utilización
Las mediciones y simulaciones realizadas demostraron que las microrredes híbridas son una opción de electrificación técnica y económica conveniente para el acceso universal a la energía para comunidades rurales.
Sin embargo, el ingeniero de la UNNE aclaró que la estimación o el uso inadecuado del servicio por parte de los usuarios, frente a la demanda de energía, puede llevar a que esta herramienta se transforme en un proyecto sobrevaluado, que no responda adecuadamente a los estudios iniciales y demande costos muy superiores a los esperados.
“Estos modelos adaptados a las zonas rurales de la provincia servirían como base para el diseño de nuevos proyectos de este tipo que ostentan importantes beneficios sociales, productivos y ambientales”, destacó González Mayans.
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