21.4 C
Corrientes
21.7 C
Formosa
20 C
Posadas
21.1 C
Resistencia
23.4 C
Asunción
Viernes 29 de marzo de 2024
-Publicidad-

Javier Milei acordó con el hijo de un represor y puso en duda el número de desaparecidos: ¿por qué son 30 mil?

Para formalizar su acuerdo con Ricardo Bussi en Tucumán, Milei puso en duda la cifra de las víctimas de la última dictadura militar pidiendo la lista de los 30.000 desaparecidos

Para formalizar su acuerdo con Ricardo Bussi en Tucumán, Milei puso en duda la cifra de las víctimas de la última dictadura militar pidiendo la lista de los 30.000 desaparecidos

- Publicidad -spot_imgspot_img

El Diputado Nacional de La Libertad Avanza, Javier Milei, formalizó un armado electoral rumbo a las elecciones de 2023 junto al legislador tucumano de Fuerza Republicana Ricardo Bussi. Ricardo es hijo de Antonio Domingo Bussi, represor condenado de la última dictadura militar con quien, a su vez, el propio Javier Milei había trabajado como asesor.

Como para cerrar con broche de oro, Milei volvió a cuestionar en una conferencia de prensa el número de desaparecidos por la última dictadura cívico militar, generando el repudio de diferentes sectores de la sociedad.Dame todos los nombres que llegan a 30 mil, ¿sabés cuántos tiene registrado la Secretaría de Derechos Humanos“, contestó a una periodista que le preguntó sobre el tema.

SUSCRIBITE GRATIS AL NEWSLETTER

No te pierdas las últimas noticias en tu e-mail

30 mil: el símbolo detrás de una cifra que permanece abierta

Negar o intentar reducir la cantidad de desaparecidos es un método habitual de quienes intentan apelar a un electorado de derecha, incluyendo también los sectores más extremos, llegando hasta negacionistas o defensores de los represores de la dictadura militar. Pablo Shoklender, antes cercano a las Madres de Plaza de Mayo, llegó a decir que la misma Hebe de Bonafini le había confesado que el número había sido inventado. Luis Labraña, ex militante de montoneros, cada 24 de marzo hace su recorrida por algunos medios para decir que quien inventó el número fue él.

Esto se hace para abonar el relato de que la lucha por la memoria y los derechos humanos es un “curro”, en donde los crímenes y los números se inflan para conseguir más dinero. Esto es falso ya que las indemnizaciones siempre se hicieron por denuncias formales y en ningún momento se realizaron subsidios por cifras divididas en 30 mil.

Trending  El Gobierno pagará en dos tramos las jubilaciones y pensiones de abril

Javier Milei cae en un nuevo absurdo al pedir una lista donde se especifiquen nombre y apellidos de los desaparecidos, no solo porque ese cuestionamiento podría bien hacérselo a su compañero de formula, hijo de un represor, sino porque niega el hecho de que es imposible saber exactamente las víctimas de un genocidio, ya que está en los intereses de sus propios perpetuadores la destrucción de las pruebas y ocultamiento de archivos.

Para graficar, tanto la cifra de víctimas del holocausto nazi, las del genocidio en Ruanda o el genocidio armenio fueron establecidos a partir de estimaciones alrededor de los pocos registros que se pudieron construir. Cuando se enuncia un dato mayor al de los registros, como pasa con el número de desaparecidos, no se hace por un fin económico, sino como reclamo y denuncia por la falta de registros para reconstruir la memoria.

Entonces, ¿cuáles son los registros?

El número que generalmente evocan los negacionistas es 8961, la cantidad de denuncias publicadas por la CONADEP. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el informe de la CONADEP fue realizado apenas dos años después de la vuelta a la democracia, cuando muchas personas todavía tenían miedo de denunciar.

En el propio prólogo del informe de la CONADEP, se advierte: “Hemos podido constatar cerca de nueve mil. Pero tenemos todas las razones para suponer una cifra más alta, porque muchas familias vacilaron en denunciar los secuestros por temor a represalias”.

Los organismos siguieron recibiendo denuncias a partir de allí, y en una nota del diario Clarin del 2003, la Secretaría de Derechos Humanos habría informado que las mismas habían ascendido a 13.000.

En el 2006 se desclasificaron documentos en Estados Unidos en donde se revelan que, para 1978, los propios militares reconocían que habían secuestrado y desaparecido a 22.000 personas desde 1975 hasta poco después del Mundial de Futbol.

Este documento pertenece a cables del agente chileno Arancibia Clavel, que contaba con acceso a las fuentes militares y altas esferas y no tenían ningún interés en “inflar” los números.

Trending  Milei elevó la presión impositiva sobre el campo argentino: el Estado se lleva el 65% de su ganancia

Teniendo en cuenta que los secuestros y desapariciones continuaron hasta bien terminada la dictadura, cabe suponer que la cifra final sería mucho mayor a 22.000 e incluso podría ser mayor a los 30.000

Otro dato relevante es la cantidad de centros clandestinos de detención de los que se tienen registros. Entre 1974 y 1983 fueron reconocidos oficialmente 762.

Desde 1974 a 1983 se tienen registro de 762 centros clandestinos de detención y tortura.

De ahí que se supone que el número total de desaparecidos no sólo es mayor que la cantidad de denuncias, sino que podría incluso superar a los 30.000, ya que suponer que solo fueron 9.000 implicaría que en promedio por cada centro clandestino pasaron 11 personas. Si tomamos la cifra de 30.000 implicaría que esta cifra sufriría a apenas 40 personas por centro.

En cambio, está confirmado que en muchos centros esta cifra supera los miles de personas. Se sabe que por la ESMA, por ejemplo, pasaron unas 4.500, por La Perla, en Córdoba, otras 2.500, por Vesubio otras 2.000 y por el Club Atlético otras 1.500

Es decir, solo con la cantidad de registros que se tienen de éstos centros de tortura la cantidad de víctimas del terrorismo de estado superan las 15.000 personas. Teniendo en cuenta que existieron otros 758 centros clandestinos a lo largo del país, la cifra de 30.000 desaparecidos no solo deja de parecer exagerada, sino que empieza a parecer una reducción de la verdadera cantidad.

ADEMÁS EN NEA HOY:

A 46 años de La Noche de los Lápices

La desaparición forzada, un crimen de lesa humanidad. Las causas en el NEA

El sincericidio de John Bolton y el plan cóndor del Siglo XXI: la participación de Estados Unidos en la desestabilización de los gobiernos de América Latina

últimas noticias

-Publicidad-

- Publicidad -spot_img
- Publicidad -

TE PUEDE INTERESAR

- Publicidad -spot_imgspot_img