Cada vez más odontólogos misioneros eligen no trabajar con obras sociales. La falta de actualización en los valores de los aranceles abonados por las diversas obras sociales y prepagas es el principal motivo por el cual cada vez más profesionales de la odontología deciden dejar de recibir a estos pacientes y apuestan en cambio, a recibirlos de manera particular, para percibir un pago más alto que se equipare más con la inflación.
Los odontólogos señalan que la inflación elevó los costos de mantenimientos y los insumos necesarios, muchos de los cuales llegan al país desde el extranjero, con precios en dólares o euros.
Con respecto a este tema, el Presidente del Colegio de Odontólogos de Misiones, Oscar Quagliozzi, explicó que “el 2022 fue un año muy complicado porque, como a cualquier trabajador, nos afectó la inflación y la suba de los precios” y recordó que “el 90% de los insumos utilizados son importados”, por lo cual además de los elevados costos, se ven afectados también por las dificultades de importación al país de los mismos.
En este sentido, Quagliozzi aseguró que entre las obras sociales que “más pronto pagan, la demora es de 60 días”, por lo que se vuelve complicado sobrellevar la situación para los profesionales del área que necesitan, como todos, mantenerse con los ingresos generados de su trabajo.
Aseguró además, que quienes continúan tratando a pacientes con obras sociales, muchas veces lo hacen cobrando un arancel diferenciado por el tiempo en que tardan en pagar las obras sociales, a la cual se agregan los respectivos descuentos por Ingresos Brutos, Rentas y AFIP, por lo que el dinero que les queda ni siquiera sirve para cubrir costos.
“La atención odontológica siempre fue una actividad cara, pero hoy lo es más que nunca”, puntualizó.
El Presidente del Colegio de Odontólogos comentó que, para una extracción dental, “una obra social provincial o una de renombre nacional establece un precio de $3.500, mientras que de manera particular, el Colegio recomienda cobrar entre $8.000 a $10.000, por lo que se ve un desfasaje bastante importante”.
Para mediar con el requerimiento de los pacientes, aseguró que “por una buena relación con ellos, se trabajan diversas facilidades de pago y convenios para flexibilizar los mismos y buscar así, la manera de que los tratamientos se sigan realizando”.
A pesar de las complicaciones económicas, los profesionales continúan con un buen grado de trabajo y aunque aún no se ha avanzado en el tema, para paliar esta situación en la provincia, desde el Colegio de Odontólogos están trabajando desde lo legislativo para avanzar con una ley de aranceles que daría una solución para normalizar la situación de los pagos de plus y el abono de los montos correspondientes en tiempo y forma.
Fuente: Primera Edición.
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