España siempre fue un país muy atractivo para los argentinos que, azotados por la crisis económica, buscan labrarse un mejor futuro en Europa. Sin embargo, en las últimas semanas se difundió una noticia que recordó que son varios en el continente europeo que no siempre reciben a los latinoamericanos con los brazos abiertos.
La historia es conocida: dos gemelas argentinas de tan solo 12 años decidieron quitarse la vida saltando juntas del tercer piso de su departamento en Sallent, a las afueras de Barcelona. Fruto de la caída, una de ellas perdió la vida, mientras que la segunda permanece en el hospital.
La familia se había mudado a España hace dos años, a la localidad de 6.600 habitantes. Allí, ambas iban al instituto Llobregat. En entrevistas a medios argentinos, antes de viajar a España para reunirse con el resto de la familia después de la tragedia, el abuelo dijo que las chicas sufrían bullying en el instituto por ser argentinas.
“Les decían sudacas”, fue una de las declaraciones a la prensa que se conocieron públicamente. Asimismo, el abuelo dijo que “le pedían volver al país”.
“Ellas, a veces, intentaban defenderse pero que, en ese momento, entendían en el instituto que era un quid pro quo (‘una cosa por otra’), es decir, ‘tú haces y ellas también hacen’, pero que ellas eran castigadas más severamente” había dicho Carmen Cabestany, una profesora que preside la asociación española No Al Acoso Escolar (NACE).
“Supe de dos castigos: dejarlas solas en lo que llaman ‘la nevera’ (la heladera), a veces por seis horas, en una sala muy fría. Y, por otra parte, expulsarlas pero por más tiempo de lo que expulsaban a los otros”, dijo la educadora.
De esta manera se investiga las razones del acoso que se dijo sufrían, ya que, además, existía el hecho de que una de ellas se encontraba transicionando su género. En principio, la institución intentó negar el acoso, sin embargo otros testimonios sumado también a una carta que dejaron las niñas parece reafirmar este hecho.
Bullying en la escuela
Además del abuelo, varias compañeras de las gemelas hablaron en medios españoles afirmando que, efectivamente, habían grupos en la escuela que las acosaban por ser argentinas y se burlaban por su acento. De allí se extrae que el instituto no solo sabía esto sino que además las castigaban a ellas cuando intentaban defenderse.
Como quizás hayan leído, ha vuelto a suceder un caso de bullying escolar, en este caso a dos gemelas, en Sallent, cerca de Barcelona. Yo soy padre de dos niñas, en la clásica edad de este tipo de sucesos. Quería comentar una idea, dentro mini-hilo.
— Dani Sanchez-Crespo (@DaniNovarama) February 25, 2023
A estos testimonios se sumaron las cartas que las niñas dejaron antes de saltar. De acuerdo al diario El País de España, Alana, la niña que falleció, dijo en su carta que se sentía “incomprendido por su identidad sexual”, ya que el acoso se fue agravando cuando, tres meses antes, empezó a cortarse el pelo, usar ropa de varón y llamarse Iván.
La carta de Leila, quien también sufría acoso por ser argentina, expresó en su carta que lo hacía por solidaridad con su hermano. A su vez, en ambas cartas expresan a sus padres que no se sientan culpables por su decisión.
La palabra de los padres
Si bien el abuelo de las niñas dio su testimonio antes de viajar a España, quienes no habían hablado después de la tragedia fueron los padres de las gemelas. Días atrás, emitieron un comunicado en el que se expresaron por primera vez del hecho.
El abuelo de las niñas de Sallent:
“Había un grupo grande, instigado por tres chicos de su curso, que estaban siempre metiéndose con ellas y riéndose de su acento. Las llamaban ‘las argentinas’ y siempre estaban peleándose con ellas en el patio” (No hablaban bien el catalán) pic.twitter.com/kYQi3E8f2p
— F͎A͎C͎H͎A͎R͎ (@_Fachar_) February 25, 2023
En él, los padres agradecen a los medios de comunicación el interés de hacer eco de la tragedia, pero que sin embargo decidían no dar declaraciones a la prensa para dejar que la policía y la justicia realizara las investigaciones pertinentes.
Además, después de dejar en claro que cuando decidieran hablar lo harían a través de un comunicado, dejaron en claro que la niña fallecida no se llamaba Iván, sino que su nombre era Alana. Esta aclaración la hicieron porque algunos medios, en un intento por respetar la identidad de género de la menor, la nombraban por su nombre autopercibido.
Revuelo en España
Tras lo ocurrido se realizaron marchas del silencio en Sallent, pueblo donde ocurrió el hecho. Representantes de organizaciones contra el bullying han participado de las mismas y aprovechado el acontecimiento para concientizar sobre el acoso en las aulas y la necesidad de que las instituciones educativas tomen conciencia de la importancia de activar protocolos antibullying.
El Observatorio contra la Homofobia reaccionó a través de un comunicado, afirmando que se trataba de “una noticia que nos rompe el corazón, un niño trans de 12 años se suicida en Sallent. Una muerte marcada por la intolerancia, el bullying y la transfobia. Enviamos todo el calor al entorno de Iván y nos ponemos a disposición en caso de que se solicitara acompañamiento psicosocial y jurídico”
Los compañeros de las gemelas realizaron algunas actividades en memoria de Alana, en donde también escribieron mensajes de aliento para Leila, quien se encuentra internada pero presentando signos de mejoría.
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