El ciclo lectivo 2023 en las escuelas correntinas inició en una situación de gran complejidad, atravesada por las deficiencias logísticas, problemas edilicios provocados por la falta de inversión gubernamental y la, para nada nueva, precariedad laboral y salarial.
Se trata de una realidad que afecta a las dos partes más importantes que giran en torno a las instituciones educativas de la provincia: los estudiantes y los docentes.
Los primeros porque deben asistir a clases en lugares donde se encuentran hacinados, en el que muchas veces no cuentan con mesas ni sillas, donde no poseen ventiladores y mucho menos aires acondicionados y donde hasta, vale decir, en muchas ocasiones peligran sus vidas por la situación edilicia de pisos, paredes y techos.
Los segundos porque, además de todas las complejidades en que asisten a los establecimientos los estudiantes, deben soportar los bajos salarios que ofrece, arbitrariamente, el Gobierno provincial (con asentimiento de los sindicatos afines), incluso cuando se les suman horas extras a la jornada escolar como en el caso de las escuelas primarias de la provincia.
Otra cuestión que volvió a generar polémica este año, como los anteriores, es el cobro de cuotas mensuales para la cooperadora de cada institución que varía dependiendo del lugar en que se encuentre el establecimiento educativo y el nivel escolar de éste, y que, según tutores y medios locales, arribó hasta los $4.000 en reconocidos establecimientos del centro capitalino.
“Le cobran $3.000 a cada estudiante pero ni siquiera cuentan con sillas para cada uno”
Lo más grave de esto es que, aunque el Ministerio de Educación local señala que este tipo de aportes no deben solicitarse a los tutores y estudiantes no interviene de modo que la práctica se termine en las escuelas correntinas. Y, aunque muchos establecimientos lo desmientan públicamente, existe un gran número de tutores que aseguran que, en caso de no abonar estos montos, se les amenaza con no inscribir a sus tutelados.
Algo de esta compleja situación fue graficada en redes sociales por usuarios como “Pedro Navajas”, en Facebook, donde acompañó una foto de quién sería su hijo con la descripción: “Primer día de clases, un desastre la organización de la Escuela Normal “Juan Pujol”, donde los chicos se murieron de calor”.
Otro usuario denominado “Roberto Zorrilla”, el mismo día, se quejó que le cobraran $3.000 a cada estudiante pero ni siquiera contaran con sillas para cada uno.
“Los papis aseguran que les cobran hasta $3.000 por alumno y una “Promo” de $5.000 si son dos hermanos, para inscribirlos al ciclo lectivo 2023. Primero se abona “la cuota”, y luego se pasa al libro de inscripciones con “Las Seños”. Pero esto no sería lo más indignante, sino que desde hace 2 días, los tutores andan corriendo de salón en salón, porque los alumnos no tienen bancos, ni sillas para sentarse. Es decir, les cobran por inscribirlos, pero ni siquiera los toman en cuenta para poner el aula en condiciones y darles la “Bienvenida al Cole”… BOCHORNOSO!!!”, se explayó el usuario.
Asimismo, se quejó de que “como si la maniobra no fuera ya lo suficientemente ilegal, se extiende un “RECIBO TRUCHO”, con un sello que lleva el nombre del colegio. Los tutores que no pudieron pagar todo, “tienen hasta esta semana para hacerlo”, fue la amenaza que recibieron, según me contaron algunos”.
Por último, Zorrilla consideró que “está maniobra no solo sucede en la Escuela Normal” y mencionó que existen “colegios ubicados a metros del Ministerio que lo han hecho y muchísimos establecimientos más. La falta de asistencia del Estado a las escuelas, las empuja muchas veces a esta situación. Lamentable!”.
Tal como señaló este último usuario, la situación no sólo sucede en edificios educativos del centro de la ciudad. Un caso que llamó mucho la atención de la comunidad es lo sucedido en la escuela Cautivas Correntinas del barrio Pirayuí, de la capital, donde, el primer día de clases, más de 200 estudiantes se encontraron que no tenían sillas ni mesas para cursar.
El mobiliario solicitado al Ministerio de Educación fue de 213 mesas y sillas, de las que sólo llegaron, durante los primeros días de clases, 67 mesas. Por ello, debieron optar por rotar cursos y establecer días de asistencia en la semana para cada división, algo que fue informado por la rectora.
Reclamo docente
Aunque la situación salarial sigue ocupando el primer lugar en la lista de reclamos de los docentes correntinos, forma parte de las urgencias la cuestión de la falta de inversión en los establecimientos educativos por parte del Gobierno provincial.
“Lo interesante sería que las autoridades educativas reabran la discusión salarial y laboral”
“La pandemia nos dejó una herencia muy dura. Es un problema que acarrea el sistema educativo de la provincia la falta de mantenimiento de los edificios. Estructuras viejas o estructuras nuevas más construidas, que no cuentan con condiciones dignas para dar clases”, señaló a este medio el Secretario General del Sindicato Único de Trabajadores de la Educación de Corrientes (SUTECO), Fernando Ramírez.
Asimismo, remarcó la iniciativa del gremio de poner a consideración de los docentes de la provincia el incremento salarial que dispuso el Gobierno provincial para este año, mediante una encuesta. La participación fue masiva, participaron más de 10.500 docentes y poco más del 96% se mostró disgustado por el nuevo monto.
Sucede que el sueldo promedio terminará quedando este año en $92.000, según explicó Ramírez, y con lo acordado en paritarias nacionales llegaría a $130.000.
En el caso de la consulta por qué medidas debería tomar el conjunto de docentes que no están conformes con el incremento, un 80% optó por realizar paro y movilización, y un poco más del 8% pidió asambleas en escuelas y espacios públicos.
Por ello, desde SUTECO y otros gremios dispusieron una medida de fuerza que ya se está ejecutando desde hoy y durará hasta mañana. “Se trata de un paro masivo en toda la provincia. Los docentes buscan manifestar el descontento generalizado. Lo interesante sería que las autoridades educativas reabran la discusión salarial y laboral”, añadió el referente de SUTECO.
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Docentes correntinos confirmaron paro y movilización para el 9 y 10 de marzo
