El ministro de Economía, Sergio Massa, envió al Congreso un proyecto de ley de blanqueo de capitales llamado “Declaración Voluntaria del Ahorro Argentino no Exteriorizado”. El proyecto forma parte del acuerdo de intercambio de información financiera con Estados Unidos, que arrojaría datos más precisos sobre los dólares que los argentinos tienen en el exterior.
En un contexto de falta de dólares, un acuerdo cada vez más inflacionario con el Fondo Monetario Internacional y una sequía histórica, el interés por avanzar en medidas que inyecten divisas son clave para el oficialismo en las puertas de una nueva elección presidencial.
¿Cómo funcionará este blanqueo? ¿Qué diferencias tiene con el proyecto que impulsó el macrismo en 2016?
Blanqueo de capitales: esta vez los familiares de políticos no podrán acceder
Para entender el alcance del proyecto, en primer lugar la iniciativa crea un régimen en el cual las personas físicas y empresas “podrán declarar y repatriar los activos que voluntariamente tienen en el extranjero”. Los únicos que estarían exentos de éste beneficio serían los políticos, sus cónyuges, convivientes, padres e hijos.
Los bienes comprendidos son tenencias de moneda nacional o extranjera en el país o en el exterior, activos financieros, bienes inmuebles, bienes muebles y demás bienes en el país o en el exterior, incluyendo créditos.
Se disponen para ello tres alícuotas diferentes: un 5% para aquellos bienes que se blanqueen desde la entrada en vigencia y hasta transcurrido el plazo de 120 días corridos; un 10%, para los bienes declarados desde el vencimiento del plazo anterior y hasta transcurridos 120 días corridos y un 20%, para los bienes declarados 120 días corridos después del plazo anterior.
Además, para las personas que adhieran, no se les considerará incrementos patrimoniales no justificados por los bienes declarados. También se los libera de toda acción civil, comercial, penal tributaria, penal cambiario, penal aduanera e infracciones administrativas que pudieran surgir en relación con los bienes y tenencias incluidos en la declaración voluntaria.
De Alfonsín a Macri: una herramienta que todos los Gobiernos usan
Los proyectos de blanqueo de capitales no son algo nuevo en Argentina. Bajo la premisa de que muchos argentinos no declaran sus bienes en el exterior por evaluar como excesivas las alícuotas que esto requiere, se les brinda una ventana en la cual serán beneficiados con alícuotas preferenciales.
Desde el regreso de la democracia, todos los gobiernos han implementado distintas medidas de blanqueo de capitales con el objetivo de aumentar la recaudación de moneda extranjera. El único gobierno que no necesitó implementarlo fue el de Néstor Kirchner, que tuvo superávit gemelo.
El primer proyecto de blanqueo de capitales la implementó Alfonsín, con la aprobación de la Ley 23.495 “Régimen de Normalización de Impuestos” en febrero de 1987. La norma estableció que aquellos capitales provenientes del extranjero no estén obligados a “declarar el origen o fuente de las ganancias o beneficios normalizados” y quedaran: “liberados de toda acción civil, comercial y penal“.
Durante el gobierno de Carlos Menem, el ministro Domingo Cavallo estableció beneficios impositivos que, durante 4 años, ayudó a la repatriación de activos con una alícuota del 1% durante el primer año, en el segundo ascendía a 1,5%, hasta que a un ritmo de 0,5% adicional por año, en el cuarto era de 2,5%.
En el 2008, durante el primer gobierno de Cristina Kirchner, se aprobó la ley 26.478 de “Régimen de regularización impositiva, promoción y protección del empleo registrado, exteriorización y repatriación de capitales“. Esta norma estableció una alícuota del 8% para la declaración de activos en el exterior, 6% para la repatriación y 3% si se reinvertían en el país.
Una segunda vuelta significó en el 2013 la implementación de la ley 26.860 de “Exteriorización voluntaria de la tenencia de moneda extranjera en el país y en el exterior“.
Finalmente, el gobierno de Mauricio Macri realizó en el 2016 el mayor blanqueo de la historia argentina, con una ley que eximió de toda tributación a quienes declaraban hasta 19.000 y ofrecía una alícuota del 5% para declaraciones de hasta 50.000 y 10% para capitales mayores.
#Argentina El Gobierno envía al Congreso una ley de blanqueo de capitales para activos financieros, inmuebles, y otros. Info #LaPlata Gonnetdigital pic.twitter.com/KagQqdXa4N
— Gonnet Digital (@MagazineGonnet) May 17, 2023
Posibilidades de aprobarse
A pesar de esto, hoy los representantes de Juntos por el Cambio criticaron la medida de Sergio Massa y afirmaron que no dará quórum en sesiones extraordinarias ni en ninguna otra donde el temario incluya el ataque a la Corte Suprema.
De todos modos, la oposición no está totalmente cerrada a negociar la aprobación de un blanqueo, con algunas condiciones.
El anteproyecto generó interés entre los tributaristas, sin embargo, una parte del sector del empresariado cree que el blanqueo de capitales no es viable en el marco del “fin de ciclo” del gobierno.
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