La tragedia de los incendios en Corrientes no se acabó con el sofocamiento de los últimos focos ígneos registrados en la provincia; además de los daños vistos en la propia naturaleza, miles de productores locales deben afrontar ahora las pérdidas económicas que se cuentan por millones de pesos.
En el interior de la localidad de San Miguel, Marcos Santoro comentó a NEA HOY que el fuego devastó su campo y se llevó plantaciones de eucaliptus con alrededor de cinco años de antigüedad, alambrados, bosque nativo y plantaciones de citrus que abastecían a cuatro verdulerías locales.
La situación de este productor refleja la de otros cientos que hoy deben transitar a la fuerza por lo que será un largo periodo de recuperación económica.
Las consecuencias en primera persona
Los incendios en su campo iniciaron el primero de enero y arrasaron con más de 700 hectáreas que eran aprovechadas para distintas actividades productivas.
Santoro detalló que, según estimó en cálculos, sufrió pérdidas por 25 millones de dólares: solo en alambrado fueron afectados unos 8 millones de dólares, mientras que en plantaciones las pérdidas rondan los 10 millones de dólares.
A su vez, el productor comentó a este medio que había iniciado un proyecto para criar animales en su monte, por lo que debió adquirir alrededor de 200 kilos de semillas de pasturas. Una inversión que significó alrededor de $2.000 dólares.
Por suerte, la concreción de su proyecto se demoró, no se había adquirido para el momento de iniciarse los incendios animales y, por ello, las pérdidas no fueron mayores. Sin embargo, para combatir el fuego debió arriesgar alrededor de $300.000 dólares en maquinaria de todo tipo, como rastras, tractores, fumigadoras, herramientas para el acopio de productos agrícolas, tanques cisterna y otros insumos.
Por la gravedad de los incendios que afectaron su región, cuenta el productor, debió sacar cinco tractores de su campo y dejarlos en la ruta provincial hasta que el fuego fue sofocado. Mientras, los brigadistas locales y bomberos trabajaron sobre el terreno para enfriarlo y así evitar el avance del fuego.
Para poder tener una idea de la magnitud de las ganancias monetarias que genera un campo como el de Marcos Santoro, con alrededor de 700 hectáreas productivas, él mismo señaló que por año contabiliza alrededor de 20 millones de pesos.
De ese monto, le resulta como ganancia neta alrededor del 40% ya que debe adquirir insumos que están dolarizados y al cobrar en pesos los debe reconvertir.
Vale decir que, como aclaró Santoro, las ganancias son relativas dependiendo de la actividad productiva de cada campo.
Repercusión de la asistencia económica
Tal como informó NEA HOY, semanas atrás, el Gobierno Provincial, a través del Ministerio de Producción, puso a disposición un aporte no reintegrable dirigido a los productores de la provincia mediante un convenio de $200 millones.
Además, implementó la posibilidad de adquirir créditos a sola firma para bienes de capital e infraestructura, con tasas fijas del 19 %, un año de gracia y a pagar en 84 meses.
A su vez, el Banco Nación dispuso el otorgamiento de créditos para PyME y productores agropecuarios por $5.000 millones, además de un reintegro de $5.000 para las compras en supermercados y comercios de cercanía realizadas con tarjetas BN, mediante un aporte de $1.000 millones.
En cuanto al Ministerio de Agricultura de la Nación, el Ministro Julián Domínguez destinó $200 millones en aportes no reintegrables para paliar la situación de los productores locales.
La AFIP también determinó la suspensión hasta el 31 de diciembre de 2022 de las intimaciones, la iniciación de los juicios de ejecución fiscal y la traba de embargos, así como tampoco iniciará el proceso de caducidad por falta de cancelación de cuotas de los planes de pago realizados por contribuyentes afectados hasta la misma fecha.
Sin embargo, Santoro dijo a NEA HOY que aún no logró acceder a las líneas de créditos por la falta de comunicación que existe entre los entes gubernamentales y los productores afectados.
Sobre la eximición de impuestos, el productor aseguró que no cambiará mucho la situación crítica que deben transitar y que requieren de una mayor presencia del Estado en este momento post crisis, para interiorizarse sobre las necesidades materiales de los productores y analizar juntos las pérdidas.
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