La donación de órganos en la Argentina cambió radicalmente tras la promulgación de la Ley 27.447 de Trasplante de Órganos, Tejidos y Células, conocida como la Ley Justina.
Justina Lo Cane tenía 12 años, esperaba un corazón en 2017, y le pidió a su padre que hiciera una campaña para incentivar a las personas a que se inscribieran como donantes de manera voluntaria.
Durante la espera, su familia creó la campaña Multiplicate por Siete para generar conciencia sobre la donación de órganos. Si bien ella murió sin poder recibir un corazón, su lucha se hizo realidad y el 26 de julio de 2018 su nombre se convirtió en esperanza al promulgarse la Ley Justina, según la cual, de ahora en más, todos somos donantes salvo expreses lo contrario.
Hoy, Multiplicate por Siete es una organización sin fines de lucro que promueve la donación de órganos y cuenta las historias de quiénes ya han recibido su trasplante y las de quienes, como Matías Figueredo de Formosa, aún están a la espera. Además, se recaudan fondos para el proyecto “Casa Justina”, espacios en cada provincia para contener a las personas que necesitan un trasplante y tienen pocos recursos.
Actualmente, según los registros del Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (Incucai) en el país hay 7305 personas que necesitan un trasplante para salvar su vida en este momento. En Formosa son 63 personas en lista de espera por un órgano, la mayoría de ellas necesitan una ablación renal y hepática.
En lo que va del año en el país se realizaron 406 trasplantes; 185 personas donaron sus órganos y 4 es la cantidad de donantes por cada millón de habitantes.
Según los últimos registros en comparación entre abril del 2021 y el 2022 han aumentado la cantidad de trasplantes realizados, en Formosa en total se llevaron a cabo seis ablaciones realizadas con éxito.
En tanto, el Registro Nacional de Expresiones de Voluntad para la Donación (RENADON) que marca la expresión de voluntad o consultar centros de donación entre otros reportes, indica que las provincias de Formosa, Santiago del Estero y La Rioja son las que menos voluntades de donar órganos presentan a nivel país. Asimismo, indica que el 53 por ciento de las mujeres presentan voluntad de donación frente al 46 por ciento de los hombres.
Donación de órganos en Formosa
En 2021 se realizaron más de 3.000 trasplantes de órganos, lo que implica un aumento de un 40 por ciento con respecto a 2020. Estos trasplantes fueron posibles gracias a la concreción de 1.004 procesos de donación, 629 procesos de donación de órganos y 375 de córneas, de ese total 5 correspondieron a Formosa.
En la provincia desde hace 15 años de manera ininterrumpida el Hospital de Alta Complejidad realiza trasplante de órganos siendo el único en toda la región que realiza trasplantes de corazón, riñón, hígado y reno-páncreas.
En diciembre del 2021 cuatro pacientes que se encontraban en lista de espera, entre ellos una persona de Formosa, tienen hoy una nueva posibilidad de vida, tras un nuevo operativo de ablación y trasplante coordinado por el CUCAIFOR y puesto en marcha por el Hospital de Alta Complejidad Juan Domingo Perón.
También, en plena pandemia se pudo llevar a cabo gracias a la solidaridad de una familia formoseña, que en un momento de mucho dolor acompañó la decisión de su ser querido a favor de la donación de órganos y se pudo salvar la vida de tres personas que aguardaban un trasplante para poder continuar viviendo.
Se ablacionaron los riñones, los cuales fueron destinados a las provincias de Chaco y Misiones, mientras que el trasplante hepático se realizó en Córdoba. Teniendo en cuenta la lista única del Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implantes (INCUCAI).
Proceso y traslado de los órganos
Cuando se detecta un posible donante en el área de cuidados intensivos de un hospital, en cualquier lugar del país, el médico inicia el proceso de donación.
Se comunica con el Organismo Jurisdiccional de su provincia o con el INCUCAI. Se constata el fallecimiento de la persona.
Una vez diagnosticada la muerte, los cuidados intensivos están destinados a mantener la oxigenación de los órganos para garantizar su viabilidad. También se realizan estudios de laboratorio para determinar qué órganos son viables para trasplante y garantizar la ausencia de enfermedades infectocontagiosas.
Las cifras aseguran que solo un donante puede salvar hasta 7 vidas y como ya se conoce, este accionar se puede realizar una vez fallecido como durante en vida.
Donación de órganos de pacientes COVID-19
Una vida que concluye y otra que continúa termina por ser una de las premisas principales de la donación de órganos. Sin embargo, desde la aparición del COVID-19 si bien se siguieron realizando trasplantes y operaciones bajo estrictos protocolos, como ocurrió en Formosa que realizó el primer implante cardiovascular a un paciente con la enfermedad, un análisis preliminar para realizar trasplantes seguros con órganos de personas que murieron o padecieron coronavirus indicó que los órganos de donantes con coronavirus no transmiten la enfermedad al receptor.
Es decir que la donación de órganos de pacientes positivos con COVID-19 es segura, aunque claro, no todos los órganos de donantes COVID-19 positivos son aptos para el trasplante. Para reducir aún más el riesgo de trasplante, ahora se recomienda a los receptores que se vacunen contra el COVID-19 antes de la cirugía.
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