Si bien la primera marcha del activismo intersex ocurrió en el año 1996, recién a partir del 2016, luego de 13 años de intentos por parte de activistas y gobiernos de reconocer internacionalmente los derechos de las personas intersex, se fija el 26 de octubre como Día Internacional de la Visibilidad Intersex de acuerdo al documento del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación publicado en el año 2018.
El término LGBTIQ+ está formado por las siglas de las palabras lesbiana, gay, bisexual, transgénero, transexual, travesti, intersexual y queer . Al final se suele añadir el símbolo + para incluir todos los colectivos que no están representados en las siglas anteriores.
En esta nota en particular, el foco estará puesto en la comunidad intersexual, pocas veces mencionada y actualmente una de las que menos se discute en las esferas sociales y mediáticas de manera apropiada y con la seriedad que requiere el tema.
¿Qué es la intersexualidad?
La intersexualidad es una forma de diversidad corporal. Los cuerpos intersexuales son aquellos que poseen características sexuales (tales como los cromosomas, las gónadas y los genitales, entre otras) distintas a las del promedio estadístico, dentro de las categorías femenino/masculino socialmente construidas.
De esta manera, en las personas con variaciones intersexuales, las características sexuales innatas parecen ser masculinas y femeninas al mismo tiempo, o no del todo masculinas o femeninas, o ni masculinas ni femeninas.
Es importante destacar que la intersexualidad no es una identidad de género y no determina la orientación sexual de una persona.
En el pasado, el término “trastornos del desarrollo sexual” intentó reemplazar el término “intersexualidad”. Sin embargo, la mayoría de los activistas intersexuales, defensores, y educadores, desde mediados de la década de 1990 consideraron importante comenzar a utilizar término “intersexual” y “variaciones corporales naturales” para dejar de medicalizar la manera de referirse a las personas intersexuales, ya que en su gran mayoría no requieren intervención médica alguna.
No todas las personas intersexuales saben que lo son; en muchos casos se ignora que su sexo es biológicamente ambiguo.
De acuerdo a la ONU, se estima que solo entre el 0,05% y el 1,7% de la población mundial es intersexual, lo que es una cifra relativamente baja y muy similar a la población de habitantes pelirrojos existentes en el mundo.
Mitos a desterrar sobre la intersexualidad
Muchas veces el desconocimiento de la sociedad sobre la intersexualidad o la presión misma de esta en el hecho de determinar una sexualidad femenina o masculina ha llevado a este colectivo a sufrir la vulneración de sus derechos tanto en el plano social como médico, es por ello que es importante educar sobre el tema, hablarlo y de esta manera poder desterrar aquellos mitos con los que por años la comunidad intersexual ha tenido que cargar con ellos como estigma.
Toda persona nace hombre o mujer
Se suele presuponer que el mundo se divide en dos grupos de personas claramente definidos, el masculino y el femenino, y que las características biológicas y genéticas de todas las personas encajan en una de estas dos categorías pero el hecho de presuponer no implica que esto deba ser así.
Hay millones de personas en el mundo cuyas características sexuales no se ajustan a las típicas nociones binarias sobre los cuerpos masculinos o femeninos. Muchas de estas personas pertenecen a la comunidad intersex.
La intersexualidad es un trastorno que debe ser corregido
Las personas intersex simplemente tienen un cuerpo distinto respecto de los patrones sexuales binarios anatómicos varón/mujer. Si la vida de la persona no corre riesgo, no se debe intervenir quirúrgicamente el cuerpo sin que la persona en cuestión pueda expresarse sobre esa decisión; solo se puede llevar a cabo cuando la persona tiene suficiente comprensión del acto y presenta consentimiento libre, previo e informado ya que las cirugías son irreversibles.
Las personas intersex en realidad son transgénero
Ser intersex y ser transgénero son dos cosas diferentes ya que nuestras características físicas sexuales no tienen nada que ver con lo que consideramos nuestra identidad de género, ni por quién sentimos atracción.
La palabra “transgénero” –o trans– es un término general que abarca a las personas cuya identidad de género es diferente del sexo que les asignaron al nacer.
La palabra “intersex” tiene que ver con las características sexuales físicas, no con el sentido de identidad interno. Una persona intersex puede identificarse también como trans, pero ambas son cosas diferentes, como lo son el género y el sexo.
Una persona intersex puede ser hetero, gay, lesbiana, bisexual o asexual, y puede identificarse como mujer, hombre, ambas cosas o ninguna.
Diferencias con el no binarismo y la transexualidad
Con el avance en materia de militancia queer, muchas veces las definiciones de persona ni binaria, transexual e intersexual suelen ser confundidadas o tomadas como iguales, sin embargo existen claras diferencias que hay que señalar para una mejor educación con respecto al tema.
En primer lugar, mientras que la intersexualidad tiene que ver con las características biológicas del sexo, una persona no binaria en cambio es aquella que asume una identidad de género que se halla fuera del binarismo de género, ya que la identidad autodesignada no es totalmente femenina ni masculina, por eso suelen ser definididas como personas con un tercer género.
Las personas transexuales pasan por intervenciones quirúrgicas o por tratamientos hormonales con el objetivo de adecuar su cuerpo a su identidad de género autopercibida.
Identidad de género y orientación sexual son además dos categorías completamente separadas que representan cosas diferentes.
La orientación sexual tiene que ver con la capacidad de una persona de sentir atracción emocional, afectiva y sexual por personas de un género diferente al suyo, de su mismo género o de más de un género.
La orientación sexual no se elige ni se aprende
Por otro lado, la identidad de género está relacionada a la vivencia interna e individual del género tal como cada persona la siente y se puede corresponder o no con el sexo asignado al momento del nacimiento.
La importancia de visibilizar la intersexualidad
A lo largo de los años y con el objetivo de que sus cuerpos sean considerados dentro del estándar masculino/ femenino aceptado socialmente, muchos bebés y adolescentes intersexuales fueron sometidos a procedimientos médicos que incluyen desde tratamientos hormonales a cirugías con el propósito de ser “parte” de la sociedad”.
En muchos casos, estos tratamientos aceptados por los padres eran recomendados por los médicos como la única alternativa para que esos niños pudieran “tener una vida normal y feliz”, y no se les brindaba la información completa vinculada a la situación de personas intersexuales de sus hijos ya que era patologizado por los médicos.
En los últimos años, con el incremento de la militancia de la diversidad sexual y la educación que llevan estos grupos a las esferas sociales, algo que debería estar incluido en las clases de ESI que no se respetan en el país, es correcto afirmar que existe mayor información sobre la intersexualidad, sin embargo, muchas personas de esta comunidad siguen sufriendo estigmas, discriminación e invisibilización que violentan sus derechos humanos con abusos físicos o psicológicos.
El Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación lanzó en el año 2017 a través de la Secretaría de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural una guía informativa y práctica para informar sobre diversidad sexual y derechos humanos, un paso crucial pero que necesita ser reforzado desde las instituciones educativas para informar y evitar la patologización y discriminación de las personas en la sociedad.
De un estudio realizado en el Hospital Garrahan en el 2013 se conoció que de 42 jóvenes entrevistados y entrevistadas solo un tercio tenían buena información acerca de su diagnóstico y condición intersex en general; un 81% de intervenciones quirúrgicas fueron mayormente con vaginoplastía.
Asimismo, solo un 26% tuvo concordancia entre el sexo que les fue asignado legal y quirúrgicamente con su identidad de género, un 74% tienen un género que no coincide con el asignado por el equipo de salud, la mayoría refirió baja satisfacción personal, un tercio síntomas de ansiedad, y un 29% síntomas de depresión.
Otro problema relevante a largo plazo es la falta de seguimiento de estas personas que fueron intervenidas (dado que a los 16 o 18 años dejan de atenderse en los hospitales pediátricos que les operaron) además de la falta de formación de la mayoría de los equipos de salud para atender a personas adultas que padecen dichas cirugías y sus complicaciones asociadas.
Avances en materia de derechos en la Argentina
El 9 de mayo de 2012 se sancionó la Ley n° 26.743 de Identidad de Género en la Argentina, una medida pionera en el mundo que reconoce el derecho de las personas a ser inscriptas en su DNI acorde con su identidad de género como resultado de la lucha de las identidades disidentes que permitió dar un paso más en la construcción de una sociedad con más derechos, igualdad e inclusión.
En este sentido, se trató de la primera en el mundo que no patologiza las identidades trans y permite acceder al cambio registral a través de un simple trámite administrativo, sin necesidad de acreditar pericias médicas, intervenciones quirúrgicas o tratamientos hormonales.
Se trata de la primera Ley de Identidad de Género del mundo que no requiere diagnósticos médicos o psiquiátricos, ni operaciones de cambio de sexo para acreditar la identidad.
El 21 de Julio de 2021 el gobierno encabezado por el Presidente Alberto Fernández oficializó la incorporación en los Documentos Nacionales de Identidad (DNI) de la posibilidad de que las personas que no se reconocen dentro del sistema binario femenino/masculino puedan identificarse de esa manera con una tercera opción, que utilizará la letra “X”.
Así lo hizo con la publicación del Decreto 476/2021 en el Boletín Oficial, previo al acto de anuncio formal de la medida que se realizó en el Museo del Bicentenario de la Casa Rosada, encabezado por el presidente Alberto Fernández.
Estas medidas tomadas incidieron también en la comunidad intersexual ya que facilita el proceso de modificar el género en los documentos personales en caso que el sexo de crianza asignado por el equipo de salud y la familia no resulte el género con el cual la persona en cuestión se identifica.
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