La destitución de Pedro Castillo de la presidencia del Perú provocó una serie de levantamientos civiles en distintos lugares del país, pidiendo por la dimisión de la nueva presidenta Dina Boluarte y el cierre del Congreso.
A ésta crisis civil se le suma una crisis diplomática entre México y Perú debido no solo a la posición que tomó el presidente Andrés Lopez Obrador sobre la destitución de Pedro Castillo, sino al hecho de que el país está sirviendo de asilo para la esposa y dos hijos del ex presidente. Esto, desde el Ministerio de Relaciones Exteriores de Perú, está siendo visto como una injerencia dentro de los asuntos del país.
Tensión entre México y Perú
Las tensiones entre ambos países empezaron cuando, después de la destitución de Pedro Castillo por parte del congreso, el presidente mexicano abordó el problema en una de sus clásicas conferencias matutinas cotidianas lamentando que el congreso peruano haya destituido a un presidente elegido democráticamente.
“Lamentamos mucho lo que sucedió porque desde que ganó, legal, legítimamente, Pedro Castillo fue víctima de acoso, de confrontación. No aceptaron sus adversarios, sobre todo las élites económicas, políticas de ese país, el que él gobernara”, señaló el presidente mexicano.
Así como el presidente mexicano, los gobiernos de Argentina, Bolivia y Colombia también se pronunciaron a favor de la legitimidad de Pedro Castillo. Sin embargo, luego se reveló que el día de la vacancia, Lopez Obrador habría dado indicaciones al canciller mexicano Marcelo Ebrard que abriera la embajada para poder recibir a la familia del presidente. Sin embargo, inmediatamente ésta embajada fue sitiada por la policía del país.
#AHORA #PedroCastillo Por 61 a favor y 41 en contra (PL), pleno del Congreso aprueba moción de rechazo “a constantes e inaceptables actos de intromisión” de presidente de México Andrés Manuel López Obrador y a “inaceptable intromisión” de presidente de Colombia, Gustavo Petro. pic.twitter.com/Ilm8qTMita
— Política El Comercio (@Politica_ECpe) December 28, 2022
Al día siguiente, el embajador mexicano incluso visitó a Pedro Castillo en la cárcel para comunicarle la postura del país del norte. Esto fue visto como injerencia extranjera por el Ministro de Relaciones Exteriores. La gestión de la nueva mandataria Boluarte, además, consideró como intromisión el comunicado conjunto entre los gobiernos de Colombia, Argentina, Bolivia y México.
Después de ésto se produjeron una serie de declaraciones, en la que el presidente mexicano acusó de prepotentes las actitudes de las autoridades del Perú, quienes siguieron acusando a Lopez Obrador por darle asilo a la familia directa de Pedro Castillo.
El asilo de la familia de Castillo finalmente se concretó el 19 de diciembre. Ese día, el embajador de México fue declarado persona non grata y se le advirtió que tendría 72 horas para dejar suelo peruano. Lopez Obrador declaró que, a pesar de ésto, no romperá relaciones con Perú.
⚠️ Recomendaciones para la comunidad mexicana 🇲🇽 residente y de turismo en Perú 🇵🇪🚨 pic.twitter.com/vUaxsYli7v
— México en el Perú 🇲🇽🇵🇪 (@EmbaMexPeru) December 31, 2022
Las acusaciones de injerencia de la nueva gestión peruana no terminaron allí, y se extendieron al país vecino de Bolivia. Este miércoles, la presidenta Dina Boluarte acusó al ex presidente boliviano Evo Morales de estar interviniendo en los asuntos peruanos azuzando las protestas en favor de Castillo. Declaró además que se encuentran evaluando la prohibición de su ingreso al país.
México, un país abierto a perseguidos políticos
Aunque en principio el ofrecimiento de Lopez Obrador a Pedro Castillo de exiliarse en México parezca una oferta motivada por coincidencias ideológicas, lo cierto es que México tiene un largo y amplio historial como país de asilo para perseguidos políticos.
Sin ir más lejos, México sirvió como país refugio a varios peruanos perseguidos por los distintos gobiernos autoritarios que el país andito sufrió durante su historia. Uno de los más conocidos fue el pensador Victor Raúl Haya de la Torre, que fue recibido en México en 1923 después de haber sufrido persecución política durante el régimen de Augusto Lejía.
Las obras de los exiliados españoles en México podrán verse por primera vez en España. El Ateneo mexicano lleva a España por primera vez la obra pictórica de los exiliados republicanos https://t.co/brt6Yx3gkw a través de @elpaismexico
— Carmen Morán (@carmenmoranb) December 27, 2022
Entre 1939 y 1942, el gobierno mexicano de Lázaro Cárdenas asiló a más de 25.000 españoles, entre los que se encontraban el poeta Luis Felipe y el director de cine Luis Buñuel, que en suelo mexicano continuaría dirigiendo algunas de las películas más importantes del cine latinoamericano como “Los Olvidados” o “El Discreto Encanto de la Burguesía”.
México ha recibido exiliados cubanos en varias ocasiones, desde el poeta José Martí durante la lucha por la independencia del país hasta el mismísimo Fidel Castro, que fue perseguido en la isla por oponerse al régimen de Fulgencio Batista.
El país del norte sirvió de asilo para el líder peronista Hector José Cámpora durante la última dictadura militar y sirvió de refugio para toda la familia de Salvador Allende después del golpe de Estado perpetrado por Pinochet. Así también, en 1980 recibió a miles de indígenas que escapaban de la guerra civil en Guatemala, entre ellos, la ganadora del premio nobel Rigoberta Menchú.
Al igual que como sucedió con los republicanos españoles o los perseguidos políticos durante las dictaduras en América Latina, México recibió de brazos abiertos a exiliados ecuatorianos, a @evoespueblo y ahora a la familia de @PedroCastilloTe.
Es un honor estar con Obrador 🔥🇲🇽 https://t.co/36rlfZMLie
— Carlos Borges (@carlosborges23) December 28, 2022
Finalmente, en la historia más reciente, el gobierno de Felipe Calderón recibió al presidente de Honduras Manuel Zelaya después de que éste fuera depuesto por un golpe de estado y en el 2019, el propio Lopez Obrador recibió a Evo Morales, después de que éste sufriera también un golpe de estado que lo obligó a escapar de Bolivia.
Es cierto que muchos de los perseguidos políticos que México ha dado asilo pertenecen a ideologías de izquierda, pero esto se debe a que en la historia mundial, las ideologías de izquierdas son las que mayormente fueron víctimas de persecución.
Sin embargo, independientemente del gobierno o color político, México siempre ha sido un país abierto a los perseguidos políticos del continente, por lo que no es raro que Lopez Obrador haya ofrecido a Pedro Castillo la posibilidad de refugiarse allí.
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