La Semana Santa es una fecha católica donde los alimentos tomaron protagonismo a lo largo de la historia. Mientras para algunos es una semana espiritual y de devoción a Cristo, para otros es un momento para vacacionar y descansar en la comodidad de los días feriados.
Existen varios mitos alrededor de las comidas que son típicas para estos días, que fueron mutando a través de los siglos. Y mientras los cristianos ortodoxos no comen carne roja el viernes santo, o eligen hacer ayuno como signo de penitencia y purificación, los judíos celebran el Pesaj, festividad judía que recuerdan la salida de la esclavitud del pueblo hebreo de Egipto, fecha en la que no comen alimentos fermentados.
Una de las tradiciones judías más antiguas que fueron adaptadas por el cristianismo, es la costumbre de no comer carne roja los viernes. Si bien, la religión católica adoptó esta costumbre, en la actualidad, la Iglesia pregona la abstinencia de alimentos deseables o la modificación de conductas habituales, como signo de penitencia.
1. ¿Por qué no se come carne roja?
En la Biblia, tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento, se relata la historia de los ayunos tanto de Moisés como el mismo Jesucristo, que pasó cuarenta días en el desierto en ayunas.
Así mismo, se dice que la tradición de no comer carne roja los viernes se heredó de la comunidad judía, en representación a los 40 días en ayunas del pueblo de Israel en el desierto. Sin embargo, hay muchos fieles católicos que repiten este rito todos los días viernes del año.
Sin embargo, estas tradiciones abrieron el paso a diferentes rituales para la pascua, como por ejemplo la famosa rosca de pascua, con el huevo que representa el nacimiento, el huevo de pascuas, las empanadas de pescado, las empanadas de vigilia de verdura, el mbejú o sopa paraguaya, típicos de esta semana.
Finalmente, el gran día de celebración de esta Semana Santa, es el Domingo de Resurrección, que se festeja la vuelta de Jesús, la comunidad católica abandona a la penitencia cumplida, para celebrar con un gran festín en familia que el hijo de Dios resucitó en cuerpo y alma, y en Argentina, en particular, una de las comidas típicas para este día es el tradicional asado y los huevos de pascuas.
2. ¿Por qué se come rosca de pascuas?
La rosca de pascuas es un clásico para la mesa de los argentinos, es que, acompañada de unos mates, puede ser la combinación perfecta. Y la Semana Santa es la excusa perfecta para tener una en la mesa. ¿Pero, de dónde viene el significado de comer roscas de pascuas en Semana Santa?
Este plato, es una masa de pan común endulzado y decorados con crema pastelera. Así es como la rosca, en un principio de su existencia un simple pan leudado. Si bien su pasado no está relacionado con la religión sino con festejos paganos de la antigüedad, hoy en día es un clásico.
Las roscas fueron en su principio simples panes leudados. Sus antecedentes no están relacionados con la religión sino con festejos paganos de la antigüedad. En estas oportunidades se elaboraban unas tortas redondas hechas con higos y miel.
Otros antecedentes muestran que el origen de la rosca de Pascua también podría provenir de Italia, en Bolonia, donde los pasteleros quisieron acompañar al huevo de pascuas para esta celebración cristiana.
3. Los huevos de pascua y la influencia de Egipto
Los tradicionales huevos de pascuas tan deseados por los niños y también por adultos, es un típico dulce que los egipcios elaboraban y, en ocasiones especiales, se regalaban entre ellos.
La comunidad cristiana adoptó esta costumbre, regalándose unos a otros durante el Domingo de Pascuas, y posteriormente los pasteleros europeos reformularon la receta agregándole sorpresas dentro de los huevos, como los conocemos actualmente.
¿Cómo hacer rosca de pascua?
La receta de la rosca de Pascua, es la misma que la de un pan, pero endulzado y posteriormente decorado con pastelera y frutas.
Para elaborar una rosca de pascuas tradicional, los ingredientes son:
- 25g. levadura fresca
- 170ml agua
- 500g. harina 0000
- 1 cdita azúcar
- 100g. manteca
- 100g. azúcar impalpable
- 1/2 cdita. sal
- 3 huevos
- 1 cdita esencia de vainilla
- ralladura de naranja y limón
El procedimiento es muy simple, tal como se realiza la masa del pan, se marca una corona de harina seca en la mesada, agregando alrededor la sal, y en el centro el azúcar, los huevos, el agua, la esencia y la ralladura o agua de azhar.
Por último, se agrega en centro de la corona la levadura previamente fermentada con leche tibia y el azúcar y se comienza a incorporar hasta formar una masa unificada en un bollo.
Tips para una rosca de pascua esponjosa
Una vez formado el bollo, es importante darle golpes contra la mesada para activar la harina, y luego dejar descansar hasta que duplique su volumen. Luego, se marca el centro de la rosca con el codo, para que quede la tradicional forma de la rosca, con el espacio en el centro. Es importante ponerle algún recipiente de metal que se pueda hornear o un molde con la forma de rosca, y luego dejar duplicar su volumen nuevamente.
La rosca de pascuas se hornea a horno medio de 170 grados, y una vez que está a mitad de cocción se incorpora la crema pastelera y las frutas a elección y se pinta con huevo y leche.
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